Escrito el
14 octubre, 2015
Según los últimos estudios llevados a cabo, 2 de cada 3 personas que acuden a un dentista lo hacen por expresa recomendación de algún amigo, familiar o conocido que ya confían previamente en el profesional recomendado. Por el lado contrario, solo un 3% de las personas acuden a un dentista condicionados por los anuncios publicitarios.
Estos datos dejan ver que la opinión de clientes satisfechos, que ya conocen la cualificación técnica y profesional del dentista, son muy importantes antes de acudir a una clínica dental.
Estos son algunos aspectos que el paciente debería de tener en conocimiento antes de acudir a un dentista:
Experiencia y formación del dentista: Entre otros, sería importante conocer cual ha sido la trayectoria médica del especialista, si sigue algún tipo de formación continua, cursos de perfeccionamiento,etc.. o a que grupo colegiado pertenece.
Si cuenta con las herramientas y aparatos adecuados: para diagnosticar correctamente y realizar los tratamientos más fiables es importante que el dentista o la clínica dental cuente con todo el instrumental necesario, además de contar con una correcta esterilización del material de trabajo.
La calidad de los materiales utilizados: En salud dental no todo vale. Debemos de asegurarnos de que se utilizan materiales de marcas de confianza y con certificados de confianza. En implantes dentales este factor es fundamental, de ahí puede erradicar una abismal diferencia de precios, pero que a la larga no es productiva.
Una atención personal y humana: Si tu dentista es accesible en todo momento, dedica el tiempo que sea realmente necesario a tu atención y te ofrece un trato amable, esto tendrá repercusión en la calidad de tu tratamiento y en la propia atención que tu mismo le pondrás a tu salud dental.
Presupuestos cerrados y sin letra pequeña: Los presupuestos en tratamientos dentales generalmente deberían ser cerrados y sin sorpresas, únicamente susceptibles a cambios acordados con el paciente previo consentimiento e información completa sobre los cambios.
Garantía en los tratamientos: Que aunque no sean garantías absolutas, ya que en medicina y odontología no se pueden dar con un 100%, lo que si se puede es tener un compromiso de colaboración para realizar repeticiones a corto plazo debido a un resultado inesperado del tratamiento. Confianza y compromiso son fundamentales.
Contar con los últimos tratamientos del mercado: Una clínica dental o dentista que ofrece lo último en tratamientos dentales o trabaja con los materiales más avanzados es sinónimo de un dentista en constante formación.
Medidas preventivas para los pacientes: El dentista debe informar a sus pacientes sobre todo lo referente a la higiene personal y buenos hábitos para prevenir enfermedades y problemas dentales.
En conclusión, siempre es mejor tener en cuenta este tipo de factores a la hora de elegir a un dentista u otro, ya que a veces pequeñas diferencias de precio no compensan los problemas que pueden aparecer a corto y largo plazo en la salud dental de personas que no son tratadas adecuadamente.